Experiencia en Rovaniemi con niños… o nuestra particular «Finnish experience».
«Nuestra particular experiencia finlandesa». Ese sería el título que pondríamos al maravilloso día que pasamos en la cabaña de nuestros anfitriones en Rovaniemi. Un día en el que pudimos disfrutar de una experiencia en Rovaniemi con niños que nos encantó. Casualidades de la vida -porque mira que hay alojamientos en Rovaniemi-, la familia que nos alquiló su apartamento en nuestro viaje a Laponia tenía una cabaña a unos 50 minutos de la ciudad.
Cuando contactamos con ellos, a través de booking.com, nos ofrecieron la posibilidad de hacer una excursión a su cabaña para pasar un día distinto, y probar su tradicional sauna finlandesa. Nosotros, que para eso somos muy lanzados, no dudamos en decirles que sí. Y… «Allí donde fueres, haz lo que vieres». Así que dedicamos un día a hacer como hacen ellos, y nosotros y los peques, quedamos encantados con la maravillosa experiencia que vivimos gracias a cruzarnos con Iiris, nuestra anfitriona. Creo que fue todo un acierto vivir esta experiencia en Rovaniemi con niños.
¿Te imaginas caminar con raquetas por un sendero para ver una cascada como Auttiköngäs? ¿y disfrutar de una auténtica barbacoa lapona en familia? ¿Te gustaría disfrutar de la experiencia de hacer la croqueta en la nieve para terminar en la sauna finlandesa? ¿Y completar la sauna finlandesa con un baño a 40º en una bañera al ire libre? ¿Y si terminamos el día con una típica cena finlandesa con salmón ahumado de menú principal? Te apetece, ¿verdad?
Te lo contamos a continuación.
3,2,1… ¡En marcha!
Ese día nos levantamos un poquito antes, ya que queríamos aprovechar las horas de luz. Salimos de casa, y pusimos el Google Maps. Iiris ya nos había mandado la ubicación exacta de su cabaña el día anterior, así que nos dirigimos unos 50 minutos al sur, para encontrarnos con ellos.
La carretera, a tope de nieve.
La carretera estaba nevada, así que condujimos con mucha precaución hasta que le cogimos el «tranquillo» a eso de conducir por una carretera con nieve. El trayecto fue tranquilo, ya que era fin de semana y apenas nos cruzamos con vehículos, así que poco a poco fuimos aumentando la velocidad.
Amor a primera vista con nuestra cabaña.
Nuestra cabaña de madera. Súper bonita.
Nada más llegar, aparcamos e Iiris nos enseñó la que iba a ser nuestra cabaña por un día (era una pequeña cabaña con chimenea, cocina y sauna, independiente de la estancia principal que ellos ocupaban).
Era pequeñita y de madera, pero con más de lo que necesitábamos para ese día. No podíamos dejar de mirar donde estábamos situados, sólo árboles, nieve y más nieve. Dejamos todas nuestras cosas, y nos fuimos a descubrir nuestro primer destino, «Auttiköngäs».
Nos vamos a descubrir «Auttiköngäs».
Jussi, había preparado su furgoneta y todo lo necesario para pasar la mañana los cuatro.
Preparados en la furgoneta, con los alzadores y súper amplia.
Pasamos a hacer unas compras y nos llevó a la cascada. Aparcamos en un parking cercano al paraje donde había una cabaña que se destinaba a cafetería-bar en temporada estival. Creo que no hicimos más de 10 minutos de trayecto.
Estaba a unos 10 minutos de camino.
Allí, nos pusimos las raquetas que él mismo nos proporcionó, además de dejarnos un trineo para el peque. Una súper experiencia en Rovaniemi con niños.
Todo preparado, y… ¡a ponernos las raquetas!
Nos mostró el sendero, y nos dejó tiempo libre para hacer un trozo de ruta que rodeaba la cascada.
Acceso al sendero, muy bien señalizado, con barandillas y puentes.
Bajamos al sendero, con las raquetas y el trineo. Pisar la nieve y disfrutar del silencio en plena naturaleza, fue una pasada. Íbamos persiguiendo el sonido de la cascada, y disfrutando del maravilloso paisaje que nos brindaba la naturaleza…
Bajando al sendero en trineo.
En un momento, llegamos al puente que pasa sobre la cascada. Antiguamente, las pasarelas se utilizaban para transportar la leña río abajo. El caudal del río, es más abundante en la temporada de primavera, cuando empieza el deshielo. Pero sinceramente, el paisaje invernal no podía ser más bonito.
Cascada Auttiköngäs.
Como podéis ver, el paisaje era espectacular. Fuimos a buscar otra perspectiva de la cascada desde el otro lado del río. La imagen, junto con el sonido de la agua, nos conectó con la naturaleza hasta ponernos los pelos de punta.
Una espectacular imagen, que quedará grabada en nuestras retinas…
No parábamos de hacer fotos y los niños, disfrutaron cantidad con los montones de nieve que había a ambos lados de la senda. No había manera de avanzar porque no paraban de hacer «el ángel» y de lanzarse bolas de nieve.
No había manera de avanzar con los niños… y eso también formó parte de la ruta.
La ruta es perfecta para hacer en familia, y tiene una distancia de 3,5 km. Imagino que en otra estación, hubiera sido más fácil recorrer el sendero completo. Evidentemente, dadas las circunstancias, creo que no llegamos ni al kilómetro entre ida y vuelta…jajaja.
Cuando nos cansamos, empezamos el camino de regreso hasta llegar de nuevo a la zona de parking.
Toca volver. Parece que no, pero ya llevamos un montón de tiempo caminando entre árboles y contemplando el paisaje.
Allí había una zona en la que se podía hacer fuego. Jussi nos había preparado una hoguera para hacer una típica barbacoa lapona.
Típica barbacoa lapona, en la misma zona de parking alrededor de la cual nos sentamos para asar salchichas y entrar en calor después de la caminata.
Experiencia en Rovaniemi con niños
El almuerzo constaba de bebidas calientes (té) y leche con cacao para los peques, unos sandwiches y las salchichas asadas. Todo lo necesario para reponer fuerzas y entrar en calor.
Una vez la hoguera se apagó, recogimos y fuimos de vuelta a la cabaña.
Toca poner fin a nuestra pequeña aventura en la naturaleza.
De regreso a la cabaña…
Descansamos un rato disfrutando del calor de la chimenea de leña de nuestra cabaña. Mientras, Quique jugaba con los dinosaurios que se había traído. María hizo migas con Mariia (hija de Iiris y Jussi) y no paraban de jugar. Congeniaron genial, ya que tenían la misma edad y además se llamaban igual.
La chimenea de nuestra cabaña.
Iiris ya había dejado la sauna a punto, y también la bañera finlandesa (una especie de jacuzzi redondo, pero sin burbujas).
Iiris dejó todo listo para cuando llegáramos de la excursión, la bañera está cubierta mientras se calienta el agua.
¡Estábamos impacientes por probarla! Nos había aconsejado esperar a que anocheciera un poco, ya que la experiencia iba a ser todavía más auténtica. Y así lo hicimos… ¿Qué os parece?
Viendo anochecer desde un sitio privilegiado. – Experiencia en Rovaniemi con niños.
Fue totalmente increíble, y los niños siempre nos recuerdan esta experiencia.
Empezamos por la sauna, de la sauna nos tirábamos a la nieve haciendo la croqueta, y de la nieve pasábamos a la bañera de agua caliente… A los peques les encantó la bañera, ¡y la sauna!.
Los peques también quiesieron probar la sauna… a ratitos cortitos.
Nos divertimos un montón lanzándonos encima de la nieve… y así hubiéramos estado horas y horas, pero justo cuando estábamos ya más que relajados, Iiris nos avisaba de que la comida estaba lista.
Después de cambiarnos, y para poner «la guinda» a nuestro típico día Finlandés, disfrutamos de uno de los platos más famosos de la gastronomía lapona: «salmón ahumado» que acompañamos con otros platos que nuestra anfitriona nos preparó. Pasamos un día fantástico.
Experiencia gastronómica, de la mano de Iiris.
Apenas habían pasado las 6 de la tarde cuando iniciábamos la vuelta a nuestra casa en Rovaniemi, pero nos parecía que fuesen más de las 8 ya que hicimos un montón de cosas. El horario finlandés, nos llevó descontrolados durante toda la semana que estuvimos allí… jejeje.
Despidiéndonos de nuestra cabaña. Fue muy fácil cogerle cariño por todo lo que vivimos ese día allí…
Olvido contaros que también nos ofrecieron un paseo en moto de nieve, pero anocheció tan temprano que no nos dio tiempo a hacerlo. Aunque era una de las actividades que íbamos a hacer en un par de días y de la que os hablaré en los próximos posts.
¿Os ha gustado nuestra particular experiencia finlandesa? A nosotros nos encantó pasar así el día, y es una de las cosas que más recordamos de nuestro viaje a Laponia. Queremos dar las gracias a Jussi e Iiris, ya que sin ellos, nuestro viaje a Laponia no hubiera sido lo mismo.
Thank you so much Jussi & Iiris!
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Que experiencia más alucinante! nos ha dado una envidia sana increible al leer el post, nos encantaría dar ese paseo por la nieve y acabar en la sauna finlandesa. El salmón tenía una pinta deliciosa 🙂
Desde luego tuvisteis unos anfitriones de 10!
Buen post y bonitas fotos
Finlandia está en mi lista de viajes pendientes y espero poder cumplir este sueño muy pronto. Estupendo post con toda la información y detalles. Me ha encantado vuestra cabaña, sin duda un gustazo para volver después de estar todo el día jugando en la nieve. Estos destinos me encantan y reconozco que cuando veo las fotos siempre me entran ganas de hacer la maleta y más aun después de ver este post. Gracias por la info
Madre mía! Qué experiencia tan chula! Nos habéis puesto los dientes larguísimos. Nosotros que también viajamos con nuestro niño, así que nos encantaría vivir esa experiencia de Rovaniemi con niños . Veo que lo hicisteis en invierno. Fuisteis en navidades? Por cierto si llegamos a hacerlo, os preguntaremos por esa cabaña tan es lechal y acogedora. Saludos! Olga
Madre mia que pedazo de EXPERIENCIA, la verdad es que a veces te encuentras con anfitriones que son lo mas. Los paisajes son alucinantes, la nieve es tan bonita, la cabaña una pasada, y el mini Spa un placer para acabar el dia, menudo lujo. Asi da gusto viajar. Gracias por compartirlo, saludos
Gracias a ti Vanesa por pasarte por este rinconcito. Un viaje increíble, y unos anfitriones insuperables. Tuvimos mucha suerte de encontrarnos con ellos por casualidad, ya que la experiencia no pudo ser más auténtica. Un abrazo.
Uala María, menuda experiencia en Rovaniemi. Tus hijos no van a olvidar ese viaje en la vida; la cabaña, el salmón ahumado y ese entorno es espectacular.
¿Qué nos dices del presupuesto? Un viaje algo caro, ¿verdad?
Un abrazo, familia
Hola Mari Cruz,
Qué alegría encontrarte por aquí. El presupuesto no es económico, pero al final conseguimos gastar en 7 días más o menos lo que nos costó nuestro viaje a Disneyland de 4 días. Sé que las comparaciones son odiosas, y que son viajes completamente distintos, pero viajar a Laponia y vivir todas experiencias, ¡no se puede comparar!. Fue nuestro último viaje antes de que empezara todo esto, pero reconozco que ha sido uno de nuestros favoritos. ¡Un abrazo!
que experiencia tan linda y encantadora, debe ser toda una nota estar en una cabañita así como esa rodeada de naturaleza, me encantaría poder experimentar el jacuzzi al aire libre con esas temperaturas heladas en el exterior.
Sinceramente fue una experiencia increíble. A veces recordamos ese día como uno de los más mágicos que pasamos en Finlandia. Fue una forma increíble de acercarnos a su cultura, a su naturaleza y paisajes y cómo no, a su gastronomía. Muchas gracias por dejar tu comentario y pasarte por este rinconcito. Un abrazo.
Hola,
Hemos reservado vuelos para Laponia para el puente de diciembre. ¿Podías pasarnos información del alojamiento? ¿Es posible contratar con ellos alguna excursión similar a la que hicisteis?
Gracias,
Marta
¡Hola Marta!
Pues los enlaces te llevan a booking.com, a la misma página del alojamiento. Allí podrás contactar con los anfitriones por mensajería.
¡Ya me contarás qué tal!